No hay que abrir el paraguas antes de que llueva!

Oli se ha despertado con vocecilla gangosa y diciendo que le molestaba la garganta. No tenía fiebre y, como nos tocaba venir a las 4, hemos decidido esperar…

A las 12:30 le estaba empezando a subir la temperatura. Se encontraba cada vez peor y cuando hemos visto el 37 en el termómetro nos hemos venido al hospital, aunque no era nuestra hora.

Nos hemos subido directas al hospital de día y de ahí nos han mandado que bajáramos a urgencias pues Oli ya tenía 38,9 de fiebre. Gracias a Dios la aguja se la han puesto arriba. Ella conoce a sus enfermeras y son las que le dan seguridad, pero el hospital de día estaba tan lleno que no tenía cama; se la han puesto por primera sentada y se ha portado bastante bien!!!!

De ahí hemos bajado a urgencias. Lo mejor ha sido que enseguida nos han confirmado que no había cistitis 😰, todo viene por la garganta. Les ha costado mucho conseguir que Oli abriera bien la boca para coger la muestra de la garganta, pero a la tercera por fin lo han conseguido… Parece tema vírico, pero aún así nos van a dar amoxicilina.

Pasamos el día en un box se urgencias, esperando que se le regule la frecuencia cardiaca. No come mucho pero a media tarde se toma un brownie que parece que le remonta un poco 😊. Ahora con el nuevo ciclo de antibiótico nos puede pasar que pierda otra vez las pocas ganas de comer que parecía estaba recuperando… pero ya sabemos que es pasajero.

Por fin a las 10 nos mandan a casa. Volvemos mañana por la mañana a consulta, tempranito porque hay que hacerle una nueva analítica antes de que nos vea su médico.

Otro pequeño episodio que esperemos que no dure mucho y que no nos deje muy para el arrastre.

Nunca se me hubiera ocurrido pensar que dormiría en casa habiendo llegado al hospital con 39 de fiebre. Está claro que no hay que abrir el paraguas antes de que llueva!!!!

4 comentarios sobre “No hay que abrir el paraguas antes de que llueva!

Deja un comentario