Y por fin hoy sí que sí nos hemos ido a casa!
La noche ha mejorado bastante. Al no dormir enchufada a la bomba, las enfermeras apenas han entrado y nos hemos despertado muchísimo menos, al no tener suero continuamente entrando.
A Oli se le notaba el cansancio y como era la primera vez que pasábamos por Santa Monica le daba miedo que las enfermeras que no conocía le quitaran la aguja del porta. El momento ha sido nefasto; se ha puesto muy nerviosa y ha acabado pasando un rato muy duro por algo que se supone es bastante tontería… “Que no me quiten la aguja, hoy es viernes y me quiero quedar para ver a Piruleto”.
Una vez intentado enderezar el tema y pedir perdón a las enfermeras, que le ha costado mucho, hemos terminado de recoger la habitación para irnos a casa. Estaba feliz porque le han regalado de Coca Cola una bolsa súper chula, un peluche y un cuaderno para pintar. Le encanta su bolsa nueva para llevar todas sus cosas; mil gracias ❤
La llegada a casa ha sido estupenda y para no perder la tradición se ha puesto a jugar con sus hermanos siendo todos cirujanos con sus mascarillas!
La semana que viene volvemos a tener mucho hospi así que a descansar este finde y a disfrutar. El cole tendrá que seguir esperando muy a su pesar! 💖